Como mamás o cuidadoras, muchas veces sentimos culpa por querer tiempo para nosotras. Pero el autocuidado no es egoísmo, es una forma de amor.
Aprender a poner límites sanos es fundamental para cuidar a largo plazo sin rompernos por dentro.
¿Qué son límites sanos?
- Decir “no puedo ahora” sin sentir que estás fallando.
- Reconocer tus necesidades básicas (sueño, alimento, descanso).
- Pedir ayuda sin vergüenza.
- Darte permiso para desconectarte un rato.
Tips para empezar:
- Empieza por pequeños espacios diarios: una ducha sin interrupciones, un café en silencio, una caminata breve.
- Habla con tu familia sobre cómo pueden ayudarte.
- No esperes estar al límite para darte un respiro.
Cuidarte no es dejar de cuidar… es hacerlo mejor y por más tiempo
+1